La diferencia entre corriente alterna y corriente continua. La electricidad es un tipo de energía transmitida por el movimiento de electrones a través de un material conductor que permite el flujo de electrones en su interior. La capacidad conductora se representa a través de la conductancia eléctrica. Dentro del material conductor los electrones se pueden mover en un solo sentido o alternar en dos sentidos, en función de lo cual se pueden distinguir dos tipos de corriente. Primera, corriente continua: el flujo de corriente eléctrica se da en un solo sentido.

Generalmente se designa con las siglas DC. Segundo, corriente alterna el flujo eléctrico se da en dos sentidos y se suele designar con las siglas AC. La mayoría de redes eléctricas actuales utilizan corriente alterna, mientras que las baterías, pilas, dínamos, generan corriente continua. Vamos a mirar primero la corriente continua o DC. En la naturaleza la electricidad es relativamente rara si se compara con lo cotidiana que es en nuestra vida; solo es generada por algunos animales y en algunos fenómenos naturales como los rayos. En la búsqueda de generar un flujo de electrones artificial, los científicos se dieron cuenta de que un campo magnético podría provocar el flujo de electrones a través de un cable metálico u otro material conductor, pero esto se daba en un solo sentido, pues los electrones son repelidos por un polo del campo magnético y atraídos por el otro. Así nacieron las primeras baterías y generadores de corriente eléctrica continua, un invento principalmente atribuido a Tomás Edison, en el siglo 19.

Miremos ahora la corriente alterna o AC. A finales del siglo 19 otro científico, Nikola Tesla trabajó en el desarrollo de la corriente alterna buscando, sobre todo, poder transportar mayores cantidades de energía eléctrica y a mayor distancia, algo que es muy limitado con la corriente continua. En lugar de aplicar magnetismo de forma uniforme y constante, Tesla utilizó un campo magnético rotatorio; cuando cambia la posición de los polos también cambia el sentido de flujo de electrones, se produce así la corriente alterna. El cambio de sentido en el flujo de electrones se conoce como frecuencia y se mide en hertz, unidad que es igual a ciclos por segundo, esto quiere decir que en una corriente alterna de 60 hertz se producen 60 ciclos por segundo. En un ciclo los electrones cambian el sentido y vuelven al sentido original, es decir, se dan dos cambios de sentido por ciclo. En una corriente alterna de 60 hertz, por tanto, el flujo de electrones cambia el sentido 120 veces por segundo. La corriente alterna permite, entre otras muchas cosas, que se pueda conectar un dispositivo a un enchufe sin importar dónde esté el polo positivo y el negativo del enchufe. Sin embargo, en la corriente continua las conexiones tienen que colocar siempre el polo positivo y el negativo en una posición concreta.

Otra gran diferencia entre la corriente alterna y la corriente continua es la cantidad de energía que se puede transportar en cada tipo. La electricidad no puede viajar muy lejos antes de que empiece a perder voltaje; el voltaje es la medida de la tensión eléctrica. Cada batería está diseñada para producir corriente continua con un cierto nivel de voltaje. Así que desde el momento de la producción de la electricidad ya está predeterminada la distancia a la que se puede transportar a través del cableado. Sin embargo, la corriente alterna se puede producir en un generador y utilizar un transformador para subir o bajar la tensión de salida según las necesidades, lo que permite el transporte a una distancia mucho mayor. Ahora vamos a mirar los transformadores. Los transformadores son utilizados en todo circuito eléctrico que necesite ajustar la tensión de la corriente eléctrica que fluye por él, ya sea un ajuste al alza o un ajuste a la baja. Por ejemplo, una central eléctrica produce electricidad con un voltaje muy alto para que pueda viajar a grandes distancias y se regula a la baja en transformadores cercanos al destino final, como hogares o empresas hasta la atención adecuada para su consumo. La corriente también se puede transformar de corriente alterna a corriente continua y viceversa a través de un adaptador o inversor del voltaje, similar a los que se utilizan en los cargadores de batería de un ordenador portátil o de una smartphone. El cargador se conecta a la red doméstica que utiliza corriente alterna y es transformada en corriente continua antes de llegar al dispositivo.